En todo el mundo el objetivo ambiental está claro: reducir el calentamiento global para que se mantenga por debajo de la brecha de los 1.5°C. Pero, para poder frenar en medida de lo posible los desastres ocasionados por el cambio climático es necesario que nuestras emisiones de efecto invernadero se reduzcan por lo menos un 50% antes del 2030.
La fecha límite para cumplir con la meta está cada vez más cerca, es por ello que las organizaciones públicas y privadas deben tomar acción inmediata para alcanzar las Cero Emisiones, o Net Zero, a tiempo. Las empresas de todas las industrias necesitan trabajar por reducir sus emisiones de carbono lo máximo posible, y encargarse de equilibrar las restantes con una cantidad equivalente de eliminación de carbono.
Es en este contexto que surgen los créditos de carbono, un instrumento internacional que ayuda a las empresas, países y otras organizaciones a compensar las emisiones de carbono más difíciles de eliminar.
¿Cómo funcionan los créditos de carbono?
Un crédito de carbono es un permiso que faculta a las organizaciones de emitir una tonelada de dióxido de carbono (CO2) o el equivalente de otro gas de efecto invernadero. Existen dos mercados de carbono: el regulado y el voluntario; y en cada uno de ellos la manera en que se emiten y transaccionan los créditos es diferente.
El Mercado de Carbón Regulado
Los créditos del mercado de “tope y comercio” (cap-and-trade) o regulado, son emitidos por organizaciones gubernamentales nacionales o internacionales. En este caso, el número de créditos que se asigna cada año a las empresas está basado en los objetivos de emisiones de la misma. Bajo este programa, los reguladores gubernamentales fijan un límite anual a las emisiones de CO2 (tope) que pueden cubrir los créditos de carbono. Ese límite disminuye con el tiempo, obligando a las empresas a reducir sus emisiones gradualmente.
Algunas compañías producen menos emisiones que el número de créditos asignados, lo que les da un excedente. Sin embargo, otras empresas, principalmente las que tienen operaciones menos eficientes, producen más emisiones de las que pueden cubrir con los créditos recibidos anualmente.
Estas últimas deben comprar créditos de carbono adicionales (trade) para compensar sus emisiones y mantenerse dentro de los estándares internacionales y nacionales. Las empresas con excedente de créditos tienen la posibilidad de comercializarlos con aquellas compañías que no lograron sus objetivos de emisiones.
Los programas voluntarios
Además del mercado de carbono regulado, las compañías pueden formar parte del mercado voluntario de carbono. Este tipo de créditos está abierto para individuos, compañías y organizaciones que quieren reducir o eliminar su huella de carbono pero que no están obligadas por la ley para hacerlo.
Las entidades interesadas pueden adquirir créditos de carbono para emisiones de una actividad con un alto índice de emisiones, como un viaje largo, o bien comprarlos regularmente para eliminar sus emisiones de CO2 y demostrar su compromiso con la protección del medio ambiente. En este mercado, las empresas no tienen un límite para el número de créditos que pueden conseguir, pues el sistema está basado en proyectos que pueden ir desde la reforestación hasta mejorar la calidad del agua.
Debido a su naturaleza los créditos voluntarios tienden a ser más baratos y a fluctuar en su precio, pues no son válidos dentro del mercado regulado. Aun así, se espera que los precios de los créditos crezcan hasta 6 veces para 2031, debido al aumento en la demanda durante los últimos años.
5 beneficios de los créditos de carbono para tu empresa
Si bien muchos países de Latinoamérica no tienen un mercado regulado de bonos de carbón, en los últimos años la emisión de créditos ha aumentado drásticamente en la región. De acuerdo con Bloomberg, Chile y Brasil son los países que han liderado el camino en la emisión de bonos verdes, con alrededor de $14 mil millones de dólares (mdd) y $12 mdd respectivamente.
Sin embargo, el camino sigue siendo largo, y muchas empresas aún no se atreven a conocer los beneficios que traen los créditos de carbono a nivel social, financiero y operacional para las empresas. Algunas de las principales ventajas que trae consigo sumarse al mercado de carbono son:
- Mejora de la Imagen Corporativa: Participar en el mercado voluntario de carbono demuestra el compromiso de la empresa con la sostenibilidad y la responsabilidad social, mejorando su reputación entre clientes y socios.
- Atracción de Inversiones: Las empresas que muestran un compromiso con la reducción de emisiones pueden atraer inversiones de fondos y organizaciones que priorizan criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG).
- Innovación y Eficiencia: Al buscar maneras de reducir su huella de carbono, las empresas pueden identificar oportunidades para innovar y mejorar la eficiencia en sus operaciones.
- Ventaja Competitiva: Las empresas sostenibles pueden diferenciarse en el mercado y ganar una ventaja competitiva frente a aquellas que no adoptan prácticas ambientales responsables.
- Acceso a Nuevos Mercados: Cumplir con los estándares de sostenibilidad puede abrir puertas a nuevos mercados que exigen productos y servicios más ecológicos.
¿Quieres sumarte al mercado de los créditos de carbono? Aprende a hacerlo exitosamente con ayuda de la solución Sustainability Prospector de Benchmark Gensuite
Digitalización: La clave para una gestión exitosa de tus créditos
Para aprovechar al máximo los beneficios de los créditos de cabrón, las empresas necesitan gestionarlos adecuadamente, pues sólo de esta manera es posible cumplir con los objetivos globales de sostenibilidad y evitar pérdidas económicas.
Las empresas que deseen tener una gestión exitosa de sus créditos requieren asignarlos a centros individuales, supervisar y recopilar datos de sostenibilidad operativa, calcular sus emisiones utilizando factores basados en el mercado y asegurar la calidad de los datos para la elaboración de informes.
Todo esto es posible con ayuda de la digitalización, gracias a su capacidad para: seguir el progreso de los objetivos de sostenibilidad de las empresas, documentar los créditos de carbono y asignarlos a los sitios por año, y analizar datos en tiempo real para obtener una visión detallada de la huella de sostenibilidad.
Prueba de ello es el conglomerado manufacturero global que con ayuda de las soluciones digitales de Benchmark Gensuite logró asignar 121 créditos de carbono, por un total de 294 mil 546 MWh de electricidad, además de recibir certificados de sostenibilidad para 24 de sus sitios y reducir sus emisiones de CO2 en más de 136 mil 673 toneladas métricas.
La correcta gestión de los créditos de carbono es esencial para que las empresas puedan cumplir con los objetivos globales de sostenibilidad y contribuir eficazmente a la mitigación del cambio climático. Aprovechar las herramientas digitales puede marcar la diferencia en la eficiencia y éxito de estas iniciativas.
¿Quieres saber cómo las herramientas de Benchmark Gensuite pueden ayudarte con la gestión de tus créditos de carbono? Descubre más sobre nuestras soluciones y comienza a transformar tu impacto ambiental. ¡Agenda un demo y ponte en contacto con uno de nuestros expertos hoy mismo!